Una incursión en el día a día de una entrañable vikinga rebelde.
A Dagfrid le irritan muchas cosas, incluso su nombre. El suyo no es precisamente el nombre más bonito para una niña, pero tampoco hay muchas más opciones: las demás vikingas se llaman Astrid o Solveig. El peinado y la ropa son igual de monótonos: todas las mujeres llevan trenzas enroscadas por encima de las orejas como si fueran ensaimadas y se visten con largas prendas que parecen sacos y dificultan los movimientos. Las niñas pasan su infancia a peinar melenas, coser el mismo vestido para todo el mundo y cocinar, o mejor dicho, aprender a disecar peces porque en su tierra ¡no hay otra cosa para comer! Pero Dagfrid es diferente: lleva trenzas sueltas y pantalones. Y como no lleva una falda puede moverse y subirse al barco para ir a pescar junto a los chicos, algo que las demás no pueden hacer… porque las rachas de viento inflarían aquellos “sacos largos” como si fueran velas y acabarían dificultando la navegación.
De todas maneras, ¡Dagfrid está hasta las narices de oler y comer pescado seco! Así que tiene un plan: construir una embarcación a medida para echarse al mar en busca de nuevos territorios y alimentos que no sean pescado… Después de una navegación en solitario por fin llega a una isla, pero se lleva una decepción, ¡es una isla ya habitada! Un grupo de chicas que llevan el mismo peinado que las de su pueblo la confunden con un chico y levantan el puño en signo de amenaza… suerte que Dagfrid ve un extraño animal detrás de ellas y opta por acercarse amistosamente (“quizás sea algo comestible”, piensa). Resulta que es una oveja. Y bien, se le ocurre una idea genial: ella les enseña a pescar y disecar peces a cambio de una oveja. El trato funciona y Dagfrid vuelve a su isla con ovejas y corderos. Una vez allí, explica a su comunidad qué son estos animales, cómo se saca la lana, etc. y se convierte en un ídolo.
El fuerte temperamento de Dagfrid, el humor presente en cada página y las ilustraciones geniales de Tallec son los ingredientes que destacan en esta novela para primeros lectores.
Una historia muy divertida que replantea los roles de género en una sociedad poco igualitaria, la libertad de decisión y la importancia de meterse en juego o mantener vivo el deseo de conocer lo que no se sabe. Un libro que transmite una gran lección: y es que Dagfrid cambiará el curso de su destino y el de su pueblo gracias a su valentía, su aventura en solitario y sus conocimientos previos.
Cesiones: inglés, Italiano, Ruso, Español y Catalán